lunes, 28 de enero de 2013

Ensayo Carta a la Tierra



Carta a la Tierra, el título resume el contenido de la lectura. En una especie de carta dirigida a nuestra madre Tierra, el autor, por medio de múltiples enfoques críticos, logra llevar de una buena manera al lector a autoanalizar cómo nos relacionamos cada uno con el planeta Tierra.
Estamos acostumbrados a oír hablar del desarrollo sostenible, del reciclaje, del calentamiento global, de los desastres naturales y sociales. Sin embargo, ¿cuántas veces nos hemos sentado a analizar el caos real que sufre actualmente nuestro planeta de una forma global, como un todo? ¿Cuántas veces hemos pensado cómo factores como la educación, la pobreza, la vida, el respeto y la consideración influyen en este caos que enfrentamos? Probablemente nunca o muy pocas veces. Y esta lectura es una oportunidad de analizar cada uno de esos factores que al fin y al cabo afectan positiva o negativamente el planeta donde nacimos, crecimos, nos desarrollamos y morimos.
La mayoría de los contenidos de esta lectura,  y los principios desarrollados están basados en la responsabilidad social y universal de los seres humanos. Para entender mejor cada uno de los principios que menciona la lectura se requiere de un gran sentido común. Al final de cuentas no se trata más que de nuestra madre Tierra y el lugar donde vivimos y en el cual van a vivir nuestras futuras generaciones.
Es importante analizar cómo están relacionados un principio con otro. Por ejemplo, se habla del respeto y la consideración. No es posible construir sociedades democráticas si los gobernantes, al igual que los ciudadanos no concientizamos y actuamos irresponsablemente. Jamás se va a lograr erradicar la pobreza si no se enseña desde ya a las nuevas generaciones, el valor del desarrollo humano equitativo y sostenible. Nunca vamos a asegurar que los recursos de la tierra se preserven para generaciones presentes y futuras si no adoptamos desde ahora patrones de producción, consumo, y reproducción.
Para nadie es un secreto que lograr esto es algo muy complicado y a veces inimaginable, y que cada vez el deterioro de los valores es más grande. Sin embargo, cómo podemos empezar desde ya, desde nuestro pequeño círculo familiar, o en nuestros lugares de trabajo, a sembrar esta semilla, a predicar con nuestro ejemplo. Es un hecho que los líderes positivos son capaces de lograr grandes cosas. Por qué no convertirnos no sólo en un líder positivo del proyecto en nuestra vida laboral, sino también convertirnos en embajadores de la preservación de la Tierra, en cada uno de nuestros espacios. Muchas veces las pequeñas cosas  son las que hacen la diferencia y el que por poco comienza en grande termina. Nada ganamos formándonos como grandes profesionales, y obteniendo logros laborales y económicos importantes si no tenemos cómo ni donde disfrutar de nuestros logros alcanzados. Nada ganamos tampoco derrochando los recursos a nuestra conveniencia si el día de mañana nuestros hijos y nietos no tendrán ni donde vivir.
Es por todo esto y más que debemos plantearnos cada uno hasta donde queremos llegar, y de qué manera podemos aportar en esta causa universal.